La palabra poder proviene del latín y significa ser capaz. Es la facultad o capacidad de hacer algo. El poder es la facilidad de hacer algo, por lo tanto, es tanto habilidad como aprendizaje y como una semilla esperando a germinar tu poder ya está en ti, en tu esencia. Tu eres quien crea tu vida. Tu eres quien hace la magia.

Es importante que tú reconozcas que solo tu puedes decidir y cambiar tus circunstancias. Deja atrás los hábitos que te impiden conectar con tu poder interior. Estas son algunas de las formas más frecuentes en que pierdes tu poder:

1.- Colocarte en el papel de víctima. Cuando te colocas en el papel de víctima y decides que tus circunstancias son consecuencia de lo que otra persona hace. Con frecuencia elegimos centrarnos en lo que la otra persona hace en lugar de ver las creencias, hábitos y consecuencias de mis acciones. Con frecuencia, lo más difícil al hacernos responsables de nuestras propias omisiones, emociones y miedos es descubrir que permanecimos en una situación en donde era aparentemente más fácil esperar que otra persona señalara el camino. Así como, reconocer que hubo diversas señales y que preferimos no verlas, traicionándonos en cada una de esas negativas. Al hacernos responsables de nuestra conducta en una relación tóxica, lo más difícil es perdonarnos a nosotros mismos. Se responsable acepta el reto de ser el cocreador de tu vida.

2.- Justificar tus reacciones violentas. Las personas que acuden a la violencia como forma de reacción con frecuencia externan que la otra persona les hizo enojar. Se olvidan que nadie puede tener el control sobre tus emociones, solo tu. En la vida se presentan diferentes circunstancias, pero siempre tienes la oportunidad de elegir como tu actuar. Si permites que la emoción te inunde y tome el control de tu cuerpo, es muy probable que termines arrepintiéndote. Tu pierdes tu poder cuando permites que las emociones te inunden y reaccionas. Nadie puede hacerte enojar, tu elegiste permitir que esa emoción dominara tu actuar. No permitas que tu vida se enrede por reaccionar impulsivamente. Los magos en la antigüedad llevaban en sus atuendos estrellas para recordar que ellos al igual que los demás estaban hechos del mismo material que el universo. El otro es tu otro yo.

3.- Esperar a que mejore alguna circunstancia en el futuro sin actuar en el ahora. El futuro es incierto, no hay otro momento que este. El hábito de postergar para cuando tenga, sea o existan otro tipo de condiciones equivale a transferir tu poder a elementos ajenos. Tú y solo tú puedes construir tu futuro. Las circunstancias presentes en tu vida son el producto de las creencias y los hábitos del pasado. Cambia tus creencias, tus hábitos y acciones para atraer el futuro que deseas. Este momento es el que te sirve para construir el futuro que deseas, aprovéchalo. En la antigüedad un alquimista era aquella persona que transformaba su esencia en oro, conviértete en un alquimista.

4.- Ser descuidado con tus palabras. Tu palabra crea. Elige con sabiduría lo que sale de tu boca y aquellos compromisos que aceptas. A acostúmbrate a que lo que sale de tu boca se realice. Deja de quejarte, porque aquello a lo que le das tu atención crece más. Elige ver lo bueno de lo malo. Concéntrate en lo que sí te gusta. Desea para los demás lo que deseas para ti. Bendice a las demás personas y bendícete a ti. Muchas veces utilizamos palabras despectivas para reprocharnos nuestros errores. Deja atrás el hábito de descalificarte. Reconócete como la persona maravillosa que eres y reconoce que en las otras personas esa misma esencia divina existe. La otra persona, esta hecha de la misma esencia que tú, solo esta viviendo otra experiencia y tiene el derecho a vivirla. En la magia nos enseñaron que decir abracadabra era esencial para lograr el acto. Pues abracadabra proviene del arameo y significa yo creo conforme hablo o iré creando conforme hable. Se consciente de la magia en tu vida.

5.- No planear tu vida. El poder de centrar tu atención y fijar tu intención en aquello que sí quieres en tu vida es lo que permite que las personas, oportunidades y circunstancias que deseas lleguen a ti. He conocido familias que han planeado fiestas de cumpleaños por meses y ahorrado por años; sin embargo, jamás se han tomado el tiempo para elegir los valores que guiaran sus acciones y mucho menos para diseñar cómo desean vivir su vida en los próximos meses. Cuando no eliges, tu energía se ve dividida entre todo lo que la vida te presenta. Es como si fueras a un bufet y te llenaras probando una cucharada de cada platillo. Se el arquitecto de tu destino.

6.- No cuidar de lo que alimenta a tu mente, cuerpo y espíritu. Poseer una actitud mental positiva es tan importante como elegir lo que nuestros sentidos reciben. Tú cuerpo es como una super computadora, posees una serie de información que esta en tu subconsciente. De nada sirve que practiques la ley de la atracción si no logras cambiar las creencias que están en tu subconsciente. Este subconsciente se alimenta de lo que ve y escucha. Por eso es tan importante decidir ¿A qué le prestas atención? Si, quieres crecer en los negocios, rodéate de personas empresarias. Ve, lee y escucha lo que deseas que atraer a tu vida. Cuida de ti y de tu cuerpo eligiendo alimentos saludables y haciendo ejercicio. Que tu lenguaje interior deje de utilizar la culpa, la vergüenza y el buscar sentirte menos, háblate con generosidad y conviértete en tu mejor coach.

7.- No cuidar de ti. Nadie puede dar lo que no tiene. Si constantemente te pones en último lugar y atiendes a las necesidades de otros sin poner límites pierdes tu poder. Como parte de la autoestima inicia tu día agradeciendo por tu cuerpo, tu salud, tu prosperidad. Desarrolla hábitos que te generen felicidad y dopamina porque sabes que ya cuidaste de ti. Puede ser desde tomar una bebida saludable, hacer ejercicio, un masaje, etc. Ten una relación contigo, enamórate de ti.

8.- Permanecer en tu zona de confort. Cambia tú y cambiaras tu mundo. El exterior solo es un reflejo de tú interior. Igual como en el campo para cosechar hay que sembrar, tú también debes invertir en tu desarrollo personal. Recuerda que la única competencia válida es contigo mismo. Se trata de que cada día seas una mejor versión de ti. Introduce el hábito de leer de los temas que te apasionan y que te serán de utilidad para llegar a tu objetivo. Hay muchas formas de tener acceso a la información hoy en día y puedes prácticamente aprender cualquier cosa desde tu casa. No importa si no logras la meta propuesta, con intentarlo ya ocurrió un cambio en ti y estas más cerca de dicho objetivo. Busca siempre tu desarrollo personal.

9.- No cuidar de las emociones. Las emociones tienen una frecuencia. Existen emociones que ofrecen una alta frecuencia de vibración como el amor, la esperanza y la alegría y otras que bajan tu vibración como la ira, la ansiedad o el miedo. De nada sirve que visualices tu objetivo si durante el día tus emociones no permiten que tu señal sea escuchada por el universo. Ten cuidado con aquello que tu mente tiene en consciencia porque con una emoción obtiene el combustible para manifestarse. El miedo y el amor son dos emociones poderosas para lograr lo que la mente tiene presente. Lleva un registro de las emociones que experimentaste durante el día, conviértete en experto en inteligencia emocional y trata que la mayoría de tus emociones se encuentren en el rango de alegría, agradecimiento, amor, etc. No se trata de ocultar el enojo, miedo o ansiedad, se trata de dejarlos salir para descubrir que mensaje encierran. Tampoco se trata simplemente de experimentar la emoción sin un objetivo, sin un plan. La razón debe guiar esa emoción para usarla como el combustible de una fogata. En este blog encontraras otros posts de cómo hacerlo. En la antigüedad los magos y brujas utilizaban calderos para hacer sus hechizos, tu eres tú caldero, utiliza tu fuego interior.

10.- No comprender que en este mundo todo es energía, frecuencia y vibración. La ciencia y la física cuántica tienen innumerables ejemplos de ello. Tu teléfono y la computadora funcionan gracias a ello. ¿Qué esperas para utilizar este principio a tu favor? Cuida tu energía, busca rodearte de hábitos, circunstancias, experiencias y personas que eleven tu vibración. Imagina que eres una estación que emite una señal al universo. Tu señal se puede amplificar. Busca rodearte de personas que tengan una actitud mental positiva y compartan tus valores. Ten en cuenta que los pensamientos y hábitos de aquellas personas que te rodean serán los tuyos. Así que elige rodearte de personas que tengan cualidades que quieras incorporar en tu vida. Se selectivo con aquello a que le das tu energía, tiempo y atención.

11.- No escuchar a tu intuición. Tu intuición es tu brújula, tu guía personal. Tu eres una persona única al igual que tú camino. Escucha siempre a tu voz interior, conéctate con tu intuición para descubrir aquello que deseas y te apasiona. Sigue tus sueños visualizando el bien que obtendrás tú y las demás personas. Tu intuición te permitirá poner al ego en su lugar. No se trata solo de obtener para ti y tu beneficio personal. Actúa como una pieza de un rompecabezas, como un eslabón en una cadena, siente la conexión con todo lo que te rodea. Conéctate con la naturaleza y los ciclos que hay en ella.

En estas fechas, conecta con la magia en tu interior tu eres esa persona que con sabiduría transforma sus circunstancias y crea su realidad. Así seamos, magos, magas, hechiceros y hechiceras, brujas y brujos. Comienza a despertar tu poder interior y sentirás un cambio en ti. Hazlo con humildad recordando que cada uno de nosotros estamos conectados a los demás, que siempre hay algo que aprender y que nuestro valor proviene de poner al servicio de los demás nuestros dones. Incorpora el hábito de preguntarte ¿Cómo puede agregar valor a los demás? Inicia por tu pareja o las personas más cercanas a ti.  De nada sirve acumular, el poder es para servir.

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