PODER PERSONAL

Hablemos del PODER PERSONAL. Tu energía. Tu energía te permite construir tu personalidad y tu realidad.  Cuida a que le dedicas tu energía, tu tiempo y tu atención. El poder personal requiere un equilibrio en tu interior, una armonía; para que puedas ejercerlo al exterior. Para poder usar al máximo tu poder personal, requieres estar consciente de las elecciones que tomas en tu vida y fijar tu intención en elegir aquellas que contribuyen más al bienestar, tu felicidad y satisfacción, tanto tuyo como de tu familia, comunidad y entorno.

Cuando tenemos la posibilidad de elegir, debemos tener claros los valores o principios que nos guían. La mayoría de nuestras acciones y hábitos, provienen del inconsciente. Un ejemplo de ello es el hecho de que tomes el vehículo para ir a tu casa. Generalmente, durante el trayecto tu mente se ocupo en otros temas, por que el hábito de elegir la ruta y conducir ya esta ahí. Por ello es importante tener una guía que nos permita tomar la decisión más apegada a lo que nosotros mismos previamente decidimos que nos conduciría a nuestros objetivos.

Si yo me encuentro con hambre y acudo a la sección de comida rápida, será mucho más fácil hacer lo de siempre y lo divertido, por ejemplo, elegir una comida poco saludable. Pero, si yo ya elegí mejorar mi salud y la calidad de los nutrientes en mi cuerpo, entonces en apego a mi compromiso y valores podré elegir una comida que contribuya a mis objetivos.

De igual forma, para reconocer tu poder personal, vive en el aquí y el ahora, el presente. Aprende a conservar la paz, independientemente de las circunstancias que te rodean. Debemos dejar el hábito de etiquetar las situaciones o las emociones como buenas o malas. Necesitamos incorporar ecuanimidad. La palabra ecuanimidad proviene del latín y significa imparcialidad. Es la práctica de mantener el equilibrio y la estabilidad emocional, más allá de tus circunstancias. Aprende a usar las frases -bueno o malo ya se verá- o -todo es perfecto para mi bienestar y crecimiento-. Recuerda que no hay emociones malas o negativas, simplemente son señales que te indican algo.

Adopta una actitud mental positiva. Atraerás a tu vida aquello a lo que más le pones atención. Si en este momento, no te gustan las circunstancias que te rodean. Intenta completar la frase –Lo bueno de esto es-. Si tu trabajo no te agrada, puedes buscar lo que sí te agrada de él. Puede ser la relación con algunos compañeros de trabajo. La posibilidad de dejar un impacto positivo en tus clientes. La vista de tu oficina, su ubicación, etc. Ten una mente abierta a experimentar las circunstancias que se te presentan sin etiquetarlas. También aprendemos de lo que no nos gusta. Necesitamos en ocasiones reconocer con claridad lo que no nos gusta para poder diseñar lo que si queremos atraer a nuestra vida. Podemos aprender tanto de un mal liderazgo como de uno bueno.

Para que puedas aumentar tu poder personal es importante que desarrolles tu autoestima, cultives la resiliencia y cambies la forma en que se desarrolla tu dialogo interior. La felicidad en tu vida no depende de nadie más que de ti. Tu estas a cargo de tu felicidad.  Carl Jung, afirmó “Yo no soy lo que me sucedió. Yo soy lo que elegí ser”

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