De acuerdo con la Real Academia Española la palabra coach se emplea para nombrar a una persona que asesora a otra para impulsar su desarrollo profesional y personal. El coaching ha evolucionado en las últimas décadas y adquirido reconocimiento. ¿Por qué resulta útil un coach? En nuestro interior poseemos distintos diálogos, algunos de ellos vienen del ser inferior que tiene como objetivo la supervivencia, utilizando nuestros recuerdos. Si alguna vez tuve una experiencia desagradable emocionalmente, el ser inferior clasifica, etiqueta y relaciona para así evitar exponerme a una situación similar. Si esa situación fue durante la infancia, mis respuestas en la edad adulta siguen siendo basadas en mi forma de ver el mundo y las herramientas que tenía a temprana edad.

Cuando queremos alcanzar un objetivo nuevo y distinto, debemos dejar de ser la versión de nosotros mismos para ser la versión mejorada que logre el resultado. Debemos salir intencionalmente de lo conocido y cómodo para vivir experiencias nuevas que nos harán sentir vulnerables. Por ello resulta eficaz utilizar un coach.

El coaching busca que la persona pueda reflexionar y adquirir autoconocimiento mediante conversaciones que le ayuden a resignificar las historias en su vida; así como impulsarle a realizar acciones para alcanzar sus objetivos. Un momento que en su tiempo pudo llamarse estresante y doloroso puede verse al paso de tiempo como un momento de transformación que trajo fortaleza y nuevos conocimientos o herramientas. Podemos tener muchos sueños, pero carecer de la motivación para ser consistentes en las acciones requeridas para alcanzarlos.

Por ello, se ha incrementado el coaching, como una estrategia eficaz para impulsar y trabajar en equilibrio las metas y los deseos de las personas coachees comparándolos con lo que actualmente está en su vida. En esa brecha que se observa entre lo que deseo y lo que actualmente veo está el trabajo a realizar. Durante las sesiones se ofrecen posibilidades, diferentes puntos de vista y estrategias en busca de que los coachees puedan tener más claridad en lo que desean y confíen en que en su interior tienen las respuestas. Los coachees pueden obtener una mejor perspectiva de su situación y escucharse a sí mismos ver la situación de una forma diferente, nueva.

La clave del coaching es el registro de las acciones y la responsabilidad de llevarlas. Es el compromiso que hace el coachee para fijarse acciones orientadas a los objetivos fijados. Se fijan acciones específicas de forma que pueden ser medibles y con ello se impulsa el cambio en cada sesión; encontrando un balance entre lo que el coachee necesita hacer y lo que el coachee hace de forma habitual. Imagina una liga, se busca estirar la liga lo suficiente para que haya un crecimiento, pero no tanto como para que la liga se rompa. Es una forma de llevar registro del compromiso de las personas y continuar avanzando a los objetivos deseados, aprendiendo del proceso.

Ambos tanto coachee como coach aprenden mutuamente. La energía de cada persona influenciará en la otra. Imagina comenzar a bailar con otra persona con la que nunca lo has hecho un nuevo ritmo que jamás has bailado, tendrás que ver si su forma de marcar el paso, tomarte de la mano o sugerir la dirección te resulta cómoda. Me parece que en el coaching es similar, también debemos verificar que la energía y estrategia del coach sea la que me acomoda mejor. De igual forma el coach debe conocer si el cliente es adecuado para su forma de ser.

No es un especialista que sanará tu pasado, para ello consulta con un psicólogo o psiquiatra. Se trata de ver al futuro a lo que se aspira o desea y tener el compromiso para realizar acciones para ello. El coaching puede enfocarse en tus relaciones personales, autoestima, negocios, mejorar las conexiones profesionales, etc ¿En qué áreas de tu vida te gustaría contar con un coach?