Tener la certeza de que eres tú quien crea su realidad, hace posible reconocerte como el cocreador de tu vida. El arquetipo del mago, posee la sabiduría que ha encontrado en su interior y requiere la humildad para responsabilizarse de su vida, expandiendo su perspectiva más allá del mundo físico. Es necesario escuchar y conectar con la fuente de inspiración infinita; para algunos se trata de sus maestros, guías, ángeles, consejo técnico. Lo importante es imaginar la presencia de maestros, guías o expertos que nos proveen de inspiración, sabiduría y guía. El mago, no utiliza su conocimiento para imponer su voluntad a la de su Ser Superior. Conecta con su Ser Superior.
Aprender que no somos víctimas, requiere que ante las situaciones inesperadas recordemos siempre que hay una inteligencia creativa que nos sostiene. Que es nuestra responsabilidad disfrutar del viaje y que lo que se presenta obedece a propósito. Ser mago no significa que dejaran de presentarse en tu vida retos o situaciones incomodas. Las crisis, retos y diferentes situaciones se seguirán presentando para que veas las creencias de las que debes deshacerte. Aprender a no dejarte llevar por el drama de las situaciones; por el contrario, a tomar distancia y reconocer que este momento pasará y que puedes construir el futuro y hacer los cambios que requieres hacer en tu vida.
Confiar en que eres parte de algo más grande, que esa Inteligencia Superior te sostiene y ha tejido un plan para que llegues a tu objetivo. Tener la sensibilidad para reconocer las sincronicidades, las oportunidades y las señales que te acercan a tu objetivo. Es confiar y tener la humildad de reconocer que esa Inteligencia Superior o Poder Superior esta guiándote y que tus dones o habilidades están a su servicio. Puedes elegir personajes de la historia, de la mitología o diferentes arquetipos e imaginar que forman parte de tu consejo técnico y te brindan su guía. Puedes, despertar tus sentidos para reconocer las señales que te da el Universo y que te muestran el camino a seguir.
Cada una de las experiencias que se presentan en la vida son útiles para que puedas crecer, reconocer lo que debes modificar o adquirir nuevas herramientas. Ser consciente de que el poder del cocreador es cambiar lo que esta en ti, para que el mundo exterior resuene con tu nueva versión.
Esta semana recordé una película protagonizada por Kate Hudson en 2005 llamada “The Skeleton Key” o La Llave Maestra. La protagonista llega a Nuevo Orleans ajena a las creencias locales y poco a poco comienza a creer que poseen capacidad para hacerle daño. Con ello la protagonista se introduce a un mundo que desconoce con la creencia de que lo que otras personas hacen le puede afectar. Quiero recordarte que tu eres quien crea la magia en tu vida y que son tus creencias las que te sanan. Aquello que tu eliges creer, puede ser una herramienta poderosa, así que cuidadosamente elige que deseas que ocupe tu mente.
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